Pátzcuaro
La madre de Oscar amablemente se ofrece llevarme hasta la parada de bus que me llevará a Patzcuaro, un pueblo cercano, en la orilla del lago del mismo nombre, este pueblito, lleno de historia como no podía ser de otra manera, tiene la particularidad de que sus construcciones, sean casas, negocios u oficinas son absolutamente todas pintadas igual: un color ladrillo oscuro desde el piso hasta un metro de altura aproximadamente, y de allí para arriba todo blanco. Los letreros, todo lo escrito fuera de estas construcciones usan la misma tipografía, en color negro, logrando así una extraña sensación al caminar y similitud entre las calles. Los techos de tejas en forma de semi círculo le dan el toque colonial.
Después de recorrer un poco el centro, estaba muy cansada para hacer un recorrido mas exhastivo, tome el lanchón a la isla de Janitzio, muy cerca de allí, reconocible a lo lejos por la gigante estatua de Morelos en la cima, desde donde se aprecia una agradable vista del lago. La isla no presenta mas nada, sus callecitas en empinada cuesta estan atiborradas de vendedores de recuerdos y restaurantes.
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