Palmeras y atardeceres
Mie 5/4
Me tomo un bus a Bucerías, otro balneario cercano, mas grande este, muchos yanquis, muy lindo, unas playas amplias, arena clara, el agua es fresca, muy fresca por cierto comparando luego con las otras, y lo mejor son las olas. Luego visito Punta de Mita, donde me asoleo un poco caminando por una playa desértica a la una de la tarde, deteniéndome a cada rato para levantar caracoles de diversos colores y tamaños y formas.
Allí es solo un paraje mínimo y luego son todas casas particulares, de gente de mucho dinero claro, que necesitan eso para desestresarse de lo que tuvieron que hacer para tener el dinero para comprar y mantener esa chalet.
Entonces decido partir para Puerto Vallarta, como era aún temprano y estaba cerca, pues venga! La costanera es realmente encantadora, amplia y con palmeras, la ciudad se va montando en los verdes cerros aledaños. Pero mi caminata se detiene al escuchar el tambor. Pues ya no es lo mismo desde que empecé a estudiar candombe en Neuquén con Huguito, ahora oigo un tambor y ahi me quedo, disfrutando, observando, comparando, pero por sobre todo con ganas de tocar! Estos pibes haciand ritmos africanos, y ahi nomas nos quedamos charlando del tambor y de la vida.
Luego se fueron y con Oscar, uno de ellos, nos fuimos a la playa, pasamos antes por un par de chelas, y a echarnos un chapuzón antes de que refresque. Luego Oscar le compró unas tortas de ceviche a un viejo loco que pasaba por ahi, y como yo no quise, pues luego de charlar un rato hasta me regaló uno, que no pude despreciar así que tome aire y adentro, y después el atardecer… bello como no podía ser de otra forma.
Llegué a la terminal de buses de Pto Vallarta media hora antes de que saliera el último para La Peñita, lo cual me tranquilizó. En el viaje mi compañero de asiento me daba charla, un chico de la Peñita de 18 años, simpatico, muy inocente, parecia menor, contaba que los padres no lo dejaban ir a ningun lado solo, ni siquiera a Guayabitos, que es el pueblito que está pegado a la peñita… Yo me moría de sueño y de frio porque la ventanilla de ventilación estaba abierta y hacía un ofri afuera ya de noche, asique se me hizo mas ameno el viaje, al final ya no aguante y me dormi pero el pibe me iba contando los pueblitos que ibamos pasando, muy agradable viaje la verdad.
Administrator
July 3rd, 2006 at 7:16 am
Hola, no me podrías dar precios de lugares para acampar en Punta Mita? es que me quiero ir de vacaciones para allá, dime, por favor, si es muy caro por allá, si se necesita mucho dinero para sobrevivir y si hay varios lugares en donde se pueda acampar, gracias, visitaré de nuevo tu blog.